Cuando estuvimos en Zaragoza, esperamos encontrarnos con mi cuñada Sara, cuando la vi de lejos cogí la cámara y fotografié su llegada hasta nosotros. He escogido esta imagen por su naturalidad, nadie está posando para la cámara, ella venía así de contenta hacía nosotros, la composición me gusta ya que ella es el centro de la imagen en todos los sentidos. Es una de esas fotografías que tomas y hasta que no la has visto en el ordenador tras volcar todas las fotos, no eres consciente de lo bien que está la imagen.
Espero que a vosotros también os transmita la misma naturalidad y sencillez.
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2 comentarios:
Ayns, que niña mas llana y sencilla, si esque me acuerdo de ella, pero ella no se acuerda de mi jajajjaa.
ME alegro almenos saber que se encuentra bien, y tan bien... vaya tipazo!!!
Mi cuñada tiene un cuerpo de modelo, ya se lo dije. Y además le pone ganas cuando posa para una foto, se esfuerza.
Y sí, mi hermanita es una persona encantadora, clara y sincera como pocas. La quiero muchísimo.
Creo que cuando vea una foto tuya quizás se acuerde más. jejejeje
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